domingo, 29 de julio de 2012

Idílico

Bueno, a ver, no tengo muy buen recuerdo de mi abuelo. Tenía un perro pastor que me arrancó media cara cuando era niño, y ante su sonrisa de satisfacción me cayó fatal, la verdad. Lástima que cuando crecí el perro ya había muerto, y no pude tirarle sus menudillos.




Fernando Gracia Ortuño


Copyright

2 comentarios:

  1. Idílica relación abuelo-nieto-perro :)
    Una buena historia en tan pocas palabras.
    Un saludo.

    ResponderEliminar